¿Quién es el mono del "Anís el mono"?

Esta famosa marca de anís, española, por cierto, nos acompaña, en las mesas familiares, sobretodo en épocas navideñas, desde que nos alcanza la mente, y no sólo por su sabor, sino también por el relieve de su botella, que al son de una cuchara o palo, ameniza los villancicos en alguna que otra casa en tal citadas fechas. Pero, fijémonos en su etiqueta:

Hay monedas, un escudo, el nombre del dueño de la fábrica, la descripción del producto (Anisado refinado, dulce) y en el centro una especie de hombre mono, que con una mano sujeta una botella y con la otra un pergamino.

Existen varias teorías sobre el porqué de este “mono”:

Una de ellas sostiene que se debe a un mono que tenían como mascota de la familia  Bosch en la fábrica de anisados, proveniente del desembarco de uno de sus navíos desde América. Así el simio, pasó a ser uno de los divertimentos de los hermanos Vicente y José Bosh, y de la gente que se acercaba hasta la fábrica para ver sus juegos. Esto hizo que la empresa fuese conocida popularmente como la del "anís del mono".

Pero sin duda, la teoría que resulta más interesante, y que muchos consideran como cierta, es que ese hombre-mono se trata del naturalista inglés Charles Darwin, padre de la evolución.

La época en la que los hermanos Bosh lanzaron al mercado su anís, coincidió con el pleno apogeo del revuelo suscitado en la comunidad científica por las teorías evolucionistas de Darwin (finales del siglo XIX) frente a las clásicas y fijistas teorías que defendían que las especies habían permanecido inmutables desde su creación. 


Así parece ser que los Bosh, aprovecharon tal debate para publicitar su marca como la más evolucionada. No sabemos si como apoyo al científico o buscando desacreditarlo.

Dibujo de la Etiqueta

Darwin con 29 años

Muchos reconocen claramente su cara en las facciones del mono. ¿Crees que se trata de Darwin? Juzga por ti mismo.

Además, otro hecho que apoyaría esta teoría es la etiqueta del pergamino que sostiene el primate humanoide: "Es el mejor. La ciencia lo dijo y yo no miento"; claro homenaje a Darwin.

 A veces la ciencia y sus teorías son un buen recurso, en este caso publicitario.